Guárdate los pensamientos o grítaselos al viento...

Guárdate los pensamientos o grítaselos al viento...

domingo, 12 de mayo de 2013


¿LEYENDA O REALIDAD?

No se me da muy bien contar historias, pero lo intentaré.
Todo esto sucedió hace tiempo, exactamente cuarenta años.
A mí me encantaban todos aquellos momentos en los que los problemas se solucionaban con dos palabras; cuando todos éramos amigos o cuando, simplemente, todo era más fácil. También recuerdo perfectamente aquellos paseos por las calles de Toledo, cuando jugábamos al pilla-pilla. ¡Qué especial era aquello!
Pasados unos 13 años todo cambio, ya nada era lo mismo. Mis amigos eran otros, los problemas no eran iguales y el dinero se acababa por momentos, pero yo era feliz con mi carboncillo y mi cuaderno.
Un día mientras paseaba por la calle Las Bulas oí una voz. Era dulce como un canto de sirena, sin duda era de mujer. Miré hacia atrás y, para mi asombro, no vi a nadie. Decidí ignorarla pero la voz continuaba repitiendo mi nombre. Salí corriendo hacía mi casa, entré a mi habitación y me encerré. Allí cogí mi carboncillo y empecé a dibujar a una mujer.
Días más tarde, cuando todo lo ocurrido ya se había olvidado volví a pasar por la misma calle. Mire hacia los lados y  no vi nada; así que pensé que lo ocurrido el otro día había sido imaginación mía, pero me equivocaba. La misma voz rellenaba el silencio, la misma voz de los días anteriores. Decidí no descansar hasta encontrar de donde venía aquel dulce sonido y cuando estuve a punto de rendirme observé a lo lejos una vieja casa de la que venía aquel sonido tan hermoso, pero cuando llegue a la casa de donde provenía el sonido, estaba completamente cerrada. Más tarde, decidí volver a mi casa y seguir investigando el día siguiente cuando saliese el sol.
Como me había prometido a mí misma, me levanté con el propósito de ir a la casa del sonido envolvente.  Cuando llegué a mi destinado pregunté a un señor que vivía en los alrededores, él me contó que hace unos cuantos años ahí vivía una bella mujer casada con un hombre mayor que ella, el marido salió de la casa un día y la encerró dentro. Nunca se supo nada del matrimonio. En ese momento empecé a oír voces extrañas en mi interior, mi cabeza se estaba volviendo loca, me iba a estallar. 

Esta historia mucha gente cree que es mentira o que, simplemente, es una leyenda, pero algo en mi interior me dice que no es así.   

No hay comentarios:

Publicar un comentario