En un mundo, donde casi todo el mundo se metía con Sasa, excepto él, Alberto que el era su amigo, pero cuando estaba con él, no se enteraba casi lo que pasaba a su alrededor, ademas se sentía distinta, cuando estaba a su lado.
Un día a Sasa, empezó a pensar en el y se le ocurrió que quizás se habría enamorado de él, entonces, se lo pregunto a su amiga Claudia, ella le dijo, que es que ella se había enamorado de Alberto, pero Sasa no sabia como reaccionar, por que los amigos de Alberto le decían que estaba por ella, pero ella no sabia que hacer.¿y si le estaban mintiendo?si le pedía salir y ella decía que no, habría hecho el ridículo y se arrepentiría durante meses, además se moriría de vergüenza cuando estuviera con él o le mirara, ademas Sasa es una chica, y casi siempre son los chicos quienes piden salir, así que no supo que hacer, además ella solo había tenido un novio, y se había comportado con él como sí fueran solo amigos, es decir que no sabia como tratar a un novio.Además si la gente que se metía con Sasa se enteraba que salían seguramente que se meterían con Alberto, y le haría que su vida costara menos de 5 céntimos, así que no sabia que hacer.
Días después decidió Sasa ir a hablar con Alberto, y pedirle salir, pero sin que los demás se enteraran, al fin y al cabo, todo había que aprender alguna vez, y nadie aprende sabiendo, además nadie es perfecto por lo que se podía equivocar que no pasaba nada. Alberto le dijo que si, el también estaba enamorado de ella, así que empezaron a salir, y pasado unos meses, se entero la gente, pero ni a Sasa ni a Alberto le importaba, y tampoco lo que pensaran de ellos.
Días después decidió Sasa ir a hablar con Alberto, y pedirle salir, pero sin que los demás se enteraran, al fin y al cabo, todo había que aprender alguna vez, y nadie aprende sabiendo, además nadie es perfecto por lo que se podía equivocar que no pasaba nada. Alberto le dijo que si, el también estaba enamorado de ella, así que empezaron a salir, y pasado unos meses, se entero la gente, pero ni a Sasa ni a Alberto le importaba, y tampoco lo que pensaran de ellos.
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